lunes, 11 de octubre de 2010

Los campeones mundiales y los que no los son

También en la tercera le di una madriza al Púas, sólo que a los jueces se les ocurrió regalarle la pelea y los títulos gallo a él.
- Jesús Chucho Castillo, sobre su última pelea frente a Rubén Olivares.


Muy buen sabor de boca dejó la segunda defensa del título AMB supermosca, por parte de Hugo Cázares, al poner en juego sus características más finas y ese candor de fajador que tanto le gusta a la gente; muy mal sabor de boca dejó la captura el cintutón AMB superwelter, por parte de Rigoberto Álvarez, al desplegar su peor pelea ante un oponente mediocre, con la complicidad de los jueces.

La unificación, la mejor opción

Contra Nashiro lo demostró, una de las mejores armas de Hugo Fidel el Increible Cázares (33, 6, 2, 24KO) es su 1-2, con la salida inmediata, que muchos puntos aporta y que mucho abre la defensa de sus oponente. Además, esa manía de cambiar constantemente de guardía hacen del mochiteco un peleador con muchas posibilidades.

Sin embargo, el boxeo que más le gusta a Cázares es el intercambio brusco, donde también es muy peligroso, pero donde también es muy vulnerable. Este sábado dio un verdadero paseo a Alberto Chiquito Rossel (24, 8, 11KO), con tres caídas incluidas, pero también un cruzado potente del peruano que pudo haber mandado a la lona al Increible y acabado con su reinado.

Guardando el debido respeto que se merece el andino y tomando en cuanto el cariño que le tiene su gente, la pregunta para Hugo Fidel es ¿quién es Rossel?, porque arriesgar con un peleador como este cuando su carrera está entrando en su`periodo final y debe preferir los rivales de nombre y las peleas de ganancia, en vez de aceptar defensas a modo que en nada ayudan a su prestigio y bolsillo, aún y cuando su demostración haya sido buena.

La diferencia de estaturas y de colmillo boxístico fue evidente en el tinglado. Ya sabemos que de nuestros campeones mundiales supermosca, Cázares es el mejor, por lo mismo las mejores opciones del sinaloense en el futuro serán las unificaciones.

Juan Alberto Rosas es un fajador tremendo, que aseguraría una pelea muy vistosa contra Cázares, también aseguraría que la audiencia nacional estuviera atenta a esta contienda; sería, luego entonces, la unificación de primera mano.

Tomás Rojas es un peleador elusivo, con gran alcance y con suerte, blando para los golpes contundentes a la mandibula, pero aseguro que difícil de derrotar como campeón CMB, esta sería una buena pelea para ofertarse incluso en Estados Unidos.

Pero la que suena como el verdadero reto y la consagración, de lograr la victoria, es un combate frente al invicto y también doble campeón Ómar Nárvaez, a condición de que el argentino quiera pelear fuera de casa. Está sería la pelea más peligrosa para el Increible, por ser precisamente el estilo del Huracán el que más se le incomoda, pero tiene todas las posibilidades de vencerlo. Las tres anteriores son las peleas en la cabeza de Cázares, ojalá podamos ver alguna en 2011.

De vergüenza y de dinero

Una regla de oro en el derecho es lanzar una acusación si se tienen las pruebas mínimas de un hecho. Por lo tanto me atrevo a decir que a Rigoberto el Español Álvarez (26, 2, 19KO) le regalaron el título AMB superwelter, por dos cuestiones importantes:

En primer lugar no se explica el hecho de que Nobuhiro Ishida (22, 6, 2, 7KO), otrora campeón interino de la categoría para la AMB, haya contendido por el título ante el Español. Si un título queda vacante es la regla de tres organizaciones del boxeo, incluida ésta, que el clasificado número uno o dos contiendan con el interino.

Según la última lista del mencionado organismo, el primer clasificado es Antonio Margarito, el segundo es Anthony Mundine y el tercero es Austin Trout. Rigoberto Álvarez aparece como el noveno. Incluso en recientes fechas se habló de una posible cancelación de la contienda, no puedo decir que el dinero movió trámites, no tengo pruebas, pero de que siete nombres fueron saltados hay un documento que lo prueba.

En segundo lugar esta la pelea, en la que por su estilo lento y por su mala defensa, al Español le costó encarrilarse; mas a su contrincante le importaba más hacer payasadas y burlas, por lo que el mexicano pudo meter, a partir del tercer episodio, los golpes más contundentes, a cuentagotas, pero ganó cuatro episodios sin prisas y hasta mandó en una ocasión a Ishida a conocer la lona.

Sin embargo, desde el octavo Rigoberto prácticamente no metió golpes, incluso falló de manera espantosa volados peligrosos que de conectar de seguro habrían terminado la contienda sin controversias ni ayudas. La cuestión es que el castigo constante del japonés abrió heridas en ambos ojos y provocó sangrado en la nariz.

En las últimas tres tandas, la cuestión se volvió más adversa para Álvarez, y el japonés conectó algunas seguidillas de golpes. Aunque la pegada de Nobuhiro es endeble y de que su mano derecha prácticamente no existe, los últimos rounds fueron para el visitante sin lugar a dudas.

Si los promotores de Ishida no tenían un acuerdo previo a la pelea, seguramente protestarán las tarjetas 115-112, 114-113 y 113-114, que dieron la victoria al mexicano. También la federación japonesa debería poner cartas en el asunto. La prueba irrefutable es el video de la pelea, que para cuestiones del boxeo es un elemento válido.

Lástimas del cuarto campeón superwelter de México, porque ha sido deslustrosos su ascenso. Esperé toda la noche el KO que le diera una victoria sin lugar a dudas a un compatriota y lo único que halle fue un púgil llorando sangre, para después llorar de alegría por un trono que ante las pruebas le fue regalado.

Lo he dicho y lo recalcó: yo, en lugar de Rubén García, habría dado un 113-113 para dejar vacante la faja y marcar un empate en una pelea para el olvido, porque ni el Español ni Ishida merecían tener este título en su cintura.

Pero yo no soy juez oficial.