Hay boxeadores veteranos que siguen dando cátedra, como Juan Manuel Márquez, hay quien por fuerza de sus oponentes muestran que ya han dado lo mejor que tienen, como Rocky Juárez, pero también existen aquellos que se engañan, como Jorge Arce. Este sábado, para nuestra fortuna, los jóvenes alzaron la mano para ser protagonistas del boxeo mexicano.
Los jóvenes hablan
Tal y como se esperaba, fácil fue la adjudicación del título Intercontinental Mundo Hispano pluma CMB por parte de Eduardo “Chuky” Lazcano (21, 1 10KO), pues a pesar de las ventajas físicas de su oponente, el juarense nunca abandonó el torbellino de golpes hasta que en el octavo round el referí decidió parar la pelea.
El vendaval de golpes valió el boleto para los que asistieron a la velada “Carnaval de Campeones” en Champotón, Campeche, pero no hay que dejar de lado el modo improvisado en el que entró como retador del “Chuky” Tomás Sierra (9, 19, 6KO), ni el modo penoso en el que se retiró de la contienda.
Pero si de corazón hablamos, Juan Alberto “Topo” Rosas (32, 5, 26KO) metió todas las venas al asador para lograr penetrar en la selva de golpes que siempre es Simphiwe “Golden Master” Nongqayi (16, 1,1, 6KO), a pesar de su mala técnica y su estilo muy abierto logró lo que nadie, ni los hermanos Arce, cansar verdaderamente al sudafricano.
Si en los primeros cinco rounds la pelea se tornó pareja con el peleador negro ganando la primera mitad de los episodios y el “Topo” cerrando con poder, en el quinto los toscos ganchos a las zonas blandas del mexicano adormecieron al “Golden Master”.
Tiró el protector, se sentó antes de terminar el round y pidió que se parara la pelea, pero la esquina de Nongqayi lo mandó con todo por un KO muy improbable en el 6, donde el golpeo de Rosas lo obligó a incarse y obligó a la esquina a pedir paz.
Rosas, a quien siempre habían dejado de lado en las carteleras internacionales, mostró que hay muchos jóvenes alzando la mano por una oportunidad mundial; falta ver, sin embargo, cuanto le dura en el trono supermosca FIB ante tantos peleadores de mejor nivel en supermosca.
Esperemos que al “Topo”, verdadera estrella de la función “Verano de Campeones”, no le nieguen ahora las grandes peleas ni las grandes bolsas.
El ocaso de los héroes
Siempre luchando hasta la última campanada, con ningún título mundial en su palmarés, dando los mejores golpes cuando es demasiado tarde, Rocky Juárez (28, 7, 1, 20KO) dio el sábado el claro ejemplo de un peleador que ya no puede ser verdaderamente competitivo, un peleador para el que el mundo del boxeo se cierra.
Ante un tibio Jorge “Niño de oro” Linares (29, 1, 18KO) que uso la distancia para castigar al estadounidense de origen mexicano, la pelea se tornó monótona y triste, ya que en las cinco ocasiones que Juárez ha peleador por un cinto, las cinco se ha repetido la misma historia.
Rocky Juárez, a quien nunca han logrado noquear, peleó hasta la “última sangre” (y perdió) contra Humberto “Zorrita” Soto, Marco Antonio “Barreta” Barrera, Juan Manuel “Dinamita” Márquez y Chris John, grandes entre los grandes plumas de la última década.
En el lado contrario, una pelea en verdad extraña regresó a las noticias al recientemente despojado Jorge “Travieso” Arce (55, 6, 1, 42KO), con una victoria por KO ante Martín “Gallito” Castillo (35, 4, 18KO), con un gancho a las zonas blandas duro, sí, pero contra un peleador con anterior fama de duro.
Sólo un episodio duró a pelea y cabe cuestionar la penosa situación de Castillo, pues dos opciones saltan a la vista: uno, se dejó ganar por una bolsa considerable de dinero; dos, el físico ya no aguanta el rudo deporte del boxeo y sus épocas doradas acabaron.
Las dos posibilidades son igualmente razonables, si pensamos que hace apenas dos semanas la promotora de Arce se vio implicada en un escándalo con Eric Morel y un supuesto dinero por dejar la pelea ante “Kochulito” Montiel, que el mismo Fernando se encargó de callar con su boxeo apabullante.
Sin embargo la segunda posibilidad es la más ilustrativa porque también es el caso de Arce: el ocaso de un héroe. El “Gallito” apenas si lo tocó y un corte importante se hizo presente en el rostro del “Travieso”.
¿Vale la pena arriesgar tu cuerpo por el sueño de conseguir un título mundial más? Esa respuesta sólo la tiene el peleador y en la mayoría de los casos afirman que sí, aunque las derrotas dolorosas se sucedan después.
Clases a domicilio
En reiteradas veces Juan “Torito” Díaz (35, 4, 17KO) insistió en que la pelea de este sábado sería su regreso a la élite del boxeo, que no cometería los mismos errores que lo condujeron a la derrota ante Juan Manuel “Dinamita” Márquez (51, 5, 1, 37KO) el 28 de febrero de 2009, y que ganaría los cintos super AMB y OMB ligeros de manera contundente.
Sólo la segunda de las afirmaciones fue cierta, Díaz no fue el boxeador desbocado que batió record en lanzar golpes en las primeras cinco tandas, fue un peleador muy precavido y no se entregó al “Dinamita” con la premura que ha caracterizado su boxeo.
Es verdad que fue un “Torito” distinto, pero del lado contrario Márquez volvió a cometer los mismos aciertos que en la primera parte de esta rivalidad: un jab insistente, un recto de derecha rápido y fugaz, las clásicas combinaciones de ganchos y el rey de la noche, el uppercut de izquierda.
Si las apuestas se habían quedado 3 a 1, si el pulpo del Mandalay Bay predijo la victoria, la única verdad es que Juan Manuel Márquez es el más constante de nuestros campeones actuales, en cada pelea despliega las mismas armas con variantes espectaculares y siempre termina dando clases a sus oponentes.
Márquez es el verdadero mandón del boxeo mexicano, pero le quedan ya muy pocas peleas en el horizonte y mucho prestigio para la historia, puesto que no es de a gratis que como al Rocky, al “Dinamita” nadie lo haya mandado a dormir después de los 10 segundos.
El originario de Iztapalapa ya no debe aceptar peleas en divisiones superiores, dando ventajas a campeones que quieran colgarse de su nombre, ya no debe buscar a Manny Pacquiao porque ya le ganó en dos ocasiones, debe buscar los cuatro cintos del ligero como campeón de campeones que es.
Pero los promotores mandan y la pelea ante Humberto Soto quizás no se dé, así como tampoco la oportunidad de ir por el título FIB, vacante actualmente y que en la columna anterior tuve el error de adjudicárselo a Márquez.
Lo cierto es que a diferencia de Arce y Soto, Márquez si ha tenido en su cintura los títulos absolutos de tres categorías distintas, y a diferencia del primero, es un veterano que sí da gusto ver pelear aún.
PD: Entrenamiento público de Edgar Sosa
Asisitimos el sábado al entrenamiento público que ofreció Edgar “Iron Man” Sosa (38, 6, 22KO) de cara a su pelea del 7 de agosto contra José Luis “Olimpico” Varela (15, 7, 7KO), que no Olvera como usted quizás haya oído en su televisor.
Una mejor condición física mostró el campeón emérito minimosca CMB, producto del trabajo más dedicado en el gimnasio y al reencuentro con el régimen alimenticio que seguramente disminuyó su rigurosidad durante la recuperación de la quíntuple fractura con la que Rodel “Kid rápido” Mayol le arrebató su cinto.
Aunque le hace falta más movimientos de cintura, la defensa de Sosa se advierte adecuada para su próxima contienda, mientras que la velocidad, potencia de golpeo y resistencia están en un nivel de campeonato mundial.
Sosa se batió contra tres sparrings el primero de los cuales fue el que le exigió más y con el que sacó sus mejores golpes, el segundo fue para probar su velocidad y el tercero para la fuerza en el cierre.
Acompañado del entrenamiento se dio el prepesaje para la función “La reconquista” a celebrarse el próximo sábado, cumpliendo los protagonistas, llámense Esmeralda “La joya” Moreno, Christian “Italiano” Esquivel, Juan Antonio “Mozo” Rodriguez y el mismo Edgar Sosa, con los pesos estipulados por el reglamento CMB.
Así mismo, Sosa presentó una cartelera amateur con más de 20 peleas, donde destacó Juan “Escopeta” Córdoba (cuyo recto encabeza esta columna) que mostró buen caminado de la lona, rápidez de manos y de mente, buena técnica y combinaciones, como una fuerte pegada que obligó a retirarse de la contienda a tres rounds a su oponente Manuel Olivo.
Las fotos de estos futuros protagonistas del boxeo nacional.
Edgar Sosa (blanco y azul) en el entrenamiento público.
Juan Córdoba (blanco) vs Manuel Olivo (azul)
Ángel Androt (rojo) vs Jesús Romero (blanco)
Marco Antonio Vivanco (azul) vs Eliot Zorrilla (rojo)
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odiseosaulus@hotmail.com
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