En teoría, (las divisones del boxeo) tan finamente calibradas, fueron creadas para evitar disparidades; en la práctica, tienen el feliz efecto de crear muchos más "campeones" y muchos más intentos lucrativos de alcanzar los "títulos".
-Joyce Carol Oates, escritora de EUA.
A pesar de la fuerte demostración que dio Sammy Guty el sábado pasado, a pesar del penoso papel de la comisión de Tepic hace dos semanas, muy a pesar de los hermanos García, parece que los títulos plata e interinos (qué son prácticamente lo mismo) reinan en nuestros días, no tienen ninguna seriedad y en México, superan en número a los campeones absolutos.
En Puebla un nuevo campeón
Dramático, muestra de coraje y de cólera, pero de valentía también, resultó el momento en que Samuel Gutiérrez (26, 5, 2, 17KO) reclamó respeto a su persona ante las cámaras de la televisión abierta: denunció que tuvo que hacer peleas gratis para no perder el campeonato nacional paja y una ocasional oportunidad mundialista. Coraje y fuerza lo demostró también en su pelea, en la que su contendiente Luis Carrillo (10, 2, 1, 9KO) apenas tuvo tiempo de desmentir su fama de anestesista.
Carrillo no fue ni un contendiente, fue simplemente un espectador de la furia de Sammy Guty y del griterío en San Martín Texmelucan. Conectó peligrosos rectos al rostro del mexicano y se dio el lujo de cimbrarlo, pero le faltó boxear conforme al librito y no tuvo continuidad: boxeo de cuerdas y en ellas el poblano no lo dejó salir.
Da gusto que por fin, en tres semanas, una pelea pareja se defina no por un falso cabezazo o por mañosas tarjetas, sino por el poder de un mexicano. Lástima que el título en disputa sea el interino AMB paja y que tenga que dirimirse en fechas próximas contra algún retador oficial dado que Román el Chocolatito González (27, 0, 23KO) abandonó la categoría este mismo domingo, noqueando en dos a Francisco Chiquita Rosas (21, 8, 2, 12KO), para adjudicarse el interino AMB minimosca.
A Gutiérrez le ocurrió igual que a Rigoberto el Español Álvarez, interino AMB superwelter, quien fue anunciado con bombo y platillo como nuevo campeón mundial y tendrá, en diciembre próximo, que hacer una pelea dura ante Austin Trout para ceñirse el fajín que sí cuenta.
Tal como se esperaba, Guty ensució un poco la pelea para desmadejar la distancia del colombiano y para penetrar de forma masiva una defensa mala, hasta que en el tercer episodio el gigante Carrillo se derrumbó y, minutos después, fue necesaria la intervención del referí para detener la masacre.
En las peleas de respaldo, el puño capitalino se hizo sentir con Eduardo Canilla Escobedo (30, 3, 21KO) venciendo por las tarjetas a un muy veterano César la Cobrita Soto (63, 21, 3, 43KO), apenas por decisión unánime ante las precauciones que tomó el campeón plata CMB superpluma.
Así mismo, Nery la Pantera Sanguilán (21, 0, 9KO) dio un paseó a Eduardo Chucky Lazcano (21, 2, 10KO), con fuertes y vistosos intercambios, donde la velocidad y determinación del capitalino le dieron más frutos que los fuertes impactos que esporádicamente lanzó el juarense. Lazcano se vio muy parado y con nulo juego de cintura, como retando al contrario a saber quien pegaba más fuerte: poca inteligencia y poca guía para la tercera pelea de verdad que enfrenta el Chucky.
Sanguilán, quien es entrenando por Nacho Beristáin, no demostró una defensa pulcra como es característica de los pupílos de este exitoso formador, pero sí un limpio caminado de la lona. Las características de Nery, en suma, le permitieron ganarle a Lazcano con la misma moneda que el chihuahuense pagó a los rivales inferiores que inflaron su récord: profusión de golpes.
A veces una derrota como esta, que distaba mucho al KO que tanto anunciaron los implicados le sirve más al Chuky que sus peleas ante verdaderos costales boxísticos. Esperemos que en su próxima pelea saque frutos de su enfrentamiento con Sanguilán, si es que vale la pena, sí no, las cosas caerán por su propio peso.
Los platillos que se anuncian
No sólo Álvarez y Guty han sido invitados a la mesa de los campeones con su interinato, este sábado Óscar Cebiche Ibarra expondrá su título plata CMB supermosca ante el filipino Sony Boy Jaro que Giovanni Segura noqueó apenas en el primer round de su segunda defensa del título AMB minimosca.
También para ese 30 de octubre, se ha anunciado a Raúl Rayito García para disputar el fajín interino OMB paja contra el colombiano Luis de la Rosa, en una pelea que parece a modo para que el mexicano se alce con la victoria. Hay que recordar que Ramón el Principe García ostenta actualmente el título interino OMB minimosca.
Pero la pelea que más llama la atención es la segunda defensa de Luis el Mosquito Lazarte, monarca FIB minimosca, ante Ulises el Archie Solís, antiguo poseedor del título y el último que lo defendió en más de una ocasión. Muchos dicen que será la pelea del retorno para el tapatio, a mí me se antoja como una pelea muy buena.
Lazarte, que no se ha destacado por su pegada o por una defensa avanzada y que además ya se encuentra plantado en la veteranía de su carrera, es un rival peligroso por ese arrojo y hambre que ha mostrado en sus últimas peleas, principalmente en la que destronó a Tamara. Si el Archie vuelve a sus aires de grandeza y menosprecia al argentino, la noche del 18 de diciembre podría ser un desastre.
Si muestra respetó por el campeón, si se prepara a fondo y si hace una pelea inteligente, Solís podría terminar con el Mosquito antes de los 12 pactados. Lástima que Rivero no vuelva de nuevo al boxeo para ayudarle, sino que opte por reforzar el endeble camino de Gilberto Keb Baas.
No obstante las peleas atractivas que vienen hay que resaltar que la mayoría son por títulos de papel, que no sirven más que para engañar a púgiles como Jorge Arce (dos veces campeón mundial) o Humberto Soto (dos veces campeón mundial). Contando el cinto de Sammy Guty, en la actualidad suman 14 títulos hechizos contra 10 campeones mundiales, incluidos los unificados Fernando Kochulito Montiel y Juan Manuel Dinamita Márquez.
A sido un buen año en cuestión de peleadores que dan el corazón, pero también ha sido un año negro con las decisiones localistas. Ojalá que todos esos plata e interinos que tenemos, tuvieramos la mitad, aunque sea, de campeones absolutos más.
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